Santo Domingo, República Dominicana – 9 de octubre de 2025.
La recién designada presidenta de Barrick Pueblo Viejo, Gisselle Valera, sostuvo una reunión de cortesía con la embajadora de Canadá en la República Dominicana, Jacqueline DeLima Baril, con el propósito de reafirmar el compromiso compartido entre ambas naciones con la inversión responsable, la transparencia y la cooperación a largo plazo.

Durante el encuentro, Valera y DeLima Baril destacaron la importancia de mantener un entorno empresarial estable, transparente y predecible, que fomente la inversión continua, la creación de empleo y el crecimiento económico. Ambas coincidieron en que el respeto a las normas claras y consistentes fortalece la confianza de los inversionistas, promueve la cooperación bilateral y genera beneficios sostenibles para todos los sectores involucrados.
La presidenta de Barrick Pueblo Viejo reiteró el compromiso de la empresa con el país y sus comunidades:
“Nuestro éxito se basa en alianzas con la República Dominicana, su gente y las comunidades que nos acogen. Creemos que el valor duradero proviene de la transparencia, la cooperación y el respeto por un marco legal y fiscal estable que permita la inversión y el desarrollo”, expresó Valera.
Asimismo, resaltó que Barrick Pueblo Viejo continuará aportando de manera significativa al desarrollo económico y social del país a través de inversiones continuas e iniciativas comunitarias, como el proyecto habitacional Nuevos Horizontes, con una inversión de RD$20,000 millones, parte del programa de reasentamiento que impulsa la empresa.
Por su parte, la embajadora Jacqueline DeLima Baril subrayó el papel de la República Dominicana como un socio bilateral, regional y multilateral clave para Canadá, y destacó el compromiso de las empresas canadienses con los más altos estándares internacionales en materia ambiental, social y de gobernanza (ESG).
Finalmente, Barrick Pueblo Viejo reafirmó su compromiso de contribuir al crecimiento económico del país y de fortalecer la posición de la República Dominicana como uno de los destinos más confiables y atractivos de América Latina para la inversión minera responsable.







